Mito vs. realidad
La verdad sobre el blanqueador.
A lo largo de los años, en Clorox® hemos escuchado muchas historias fantasiosas sobre el blanqueador y decidimos que llegó la hora de disipar esos rumores. Acompáñanos para aclarar algunos mitos comunes y conocer un poco más sobre el desinfectante favorito de Estados Unidos.
Mito:
"El blanqueador de uso casero afecta la vida marina."
Realidad: No te preocupes. El blanqueador común más utilizado al final se convierte en sal y agua. El resto se trata de forma segura en plantas de residuos municipales.
Mito:
"Escuché que el blanqueador puede dañar mis equipos."
Realidad: Cuando se usa según las instrucciones, el blanqueador Clorox® es seguro para usar en una amplia gama de superficies y materiales duros, no porosos.
Mito:
"Hay cloro libre en el blanqueador."
Realidad: No, el blanqueador Clorox® no contiene cloro libre. De hecho, se deriva de la sal de mesa común, el cloruro de sodio.
Mito:
"El blanqueador formará dioxinas peligrosas."
Realidad: Cuando se usa para la limpieza y desinfección diaria, el blanqueador Clorox® no puede producir dioxinas dañinas.
Mito:
"El blanqueador es realmente un pesticida."
Realidad: Si bien la mayoría de los productos que contienen blanqueador con cloro son principalmente desinfectantes, algunos de ellos pueden usarse como pesticidas.
Mito:
"El blanqueador es una sustancia química cancerígena."
Realidad: No, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades han llegado a la conclusión de que el blanqueador no causa cáncer.
Todo sobre la desinfección.
Cómo desinfectar de forma segura
Descubre cómo mantenemos los más altos estándares de calidad y seguridad en Clorox® (solo en inglés).
Desinfectantes 101
Aprende qué son y cómo nos protegen de enfermedades infecciosas (solo en inglés).
Por qué importa desinfectar
Ve cómo el poder del blanqueador nos mantiene seguros en casa, centros médicos y el mundo (solo en inglés).
Mira lo que puede hacer el blanqueador.
Explora artículos y consejos prácticos sobre la limpieza con Clorox® Bleach.